domingo, 17 de enero de 2010

Cuando la conoció, le dijo: "Soy un tipo jodido y asi te voy a amar; jodidamente". La primera vez que la tuvo dormida le dijo al oído, sin despertarla: "Ahora tengo la llave de tu piel, cierro y me la trago". "El que la quiera que me arranque el estómago".

Después ocurrió la primera espina. Entonces el le pateó la puerta hasta que se hizo de día. Lo único que gritaba, lo que toda la noche aulló fue: "Si vas a dejarme, ni se te ocurra un domingo. Nunca un domingo...".


"Un enamorado es un paralítico que consigue una pata de palo y se cree que va a cruzar la Cordillera de los Andes".



Una noche ella decidió que no tendrían más noches. Justo un domingo de invierno, demoledor, revalsado de la peor de las tristezas: "la dominguera". La única que nunca se aprende a vaciar.

Esta vez el tipo no pateó ningún vidrio, simplemente se los masticó. Usó los dedos de pincel y escribió con sangre rabiosa en la unica ventana de la casa que daba a la luna:


"Un desenamorado es un ciego, un ciego que después de 100 años recupera la vista, justo en la mitad de la noche y entonces grita:

¿Y ésta mierda es lo que hay para ver?



Al rato se hizo lunes. Dos lunes después, la había olvidado...






[Ni se te ocurra un Domingo].-


"Nunca un domingo" - Raúl Perrone del film: GraciaDio'.-

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