Alterno la mirada para no exagerar, busco cinturones de seguridad por la senda peatonal. Nada tiene sentido sino estás. Suena el teléfono es la puta operadora avisando que tengo cuentas por pagar, es el mismo diablo el que toca el timbre para hacerme dudar. No quiero escuchar más los gritos de la soledad, me respira de cerca, me molesta y me pisotea si puede. Quiero bajar las cortinas pero están trabadas con tu ausencia. El cesto basura apesta por los mil papeles escritos con tu nombre. Te nombro y las cortinas se retuercen. Quiero que se corte la luz, estar a plena luz de las velas. Quiero correr por el pasillo, pero tu ropa interior no me permite el paso. Estoy cansada de querer limpiar el patio, no tengo fuerzas para jugar con el agua. Las plantas se me murieron, no aguantaron el frío de mis manos. No quiero que llueva, no soporto recordarte. Quiero que sea siempre de noche para no imaginar que es el sol es el brillo de tus ojos. Te odio! Te odio! nada mas quiero pensar, quiero convidar ese pensamiento a mi corazón para que se haga realidad. Para no llorarte, para salir de mi rincón, para caminar, o al menos gatear. Rompo los espejos, reflejan tus besos olvidados sobre mi boca. Refleja tus manos en mis cabellos. No quiero vestirme, prefiero sentirme desnuda así como me dejaste...